Imprimir procedimiento Intervinientes: Autoprotección ante casos sospechos de viruela del mono

Actuación ante posibles casos de pacientes infectados por viruela del mono

Este procedimiento tiene como objetivo las indicaciones del manejo de los casos con sospecha o confirmación de viruela del mono en el escenario actual.

La viruela del mono es una zoonosis vírica que ha sido declarada emergencia de salud pública de importancia internacional por el Directora General de la OMS el 23 de junio de 2022.

Las lesiones son firmes o gomosas, bien circunscritas, profundas y a menudo desarrollan umbilicación (se asemeja a un punto en la parte superior de la lesión). Se describen a menudo como dolorosas hasta la fase de curación, cuando se convierten en picor (costras). Suelen aparecer en las zonas genital y anorrectal o en la boca. Este exantema no siempre aparece en las palmas de las manos y las plantas de los pies.

Las lesiones suelen desarrollarse simultáneamente y evolucionar juntas en cualquier parte del cuerpo. La evolución de las lesiones pasa por cuatro etapas: macular, papular, vesicular (elevadas y llenas de líquido claro) y pustular (llenas de líquido opaco), antes de la formación de costras y la descamación. Una vez que se han caído todas las costras y se ha formado una nueva capa de piel, la persona deja de ser contagiosa.

En el brote actual también se han dado con frecuencia síntomas rectales (por ejemplo, heces purulentas o sanguinolentas, dolor rectal y/o sangrado rectal)

La fiebre y otros síntomas prodrómicos (por ejemplo, escalofríos, linfadenopatía, malestar general, mialgia o cefalea) pueden aparecer antes de la erupción, pero se pueden dar después de la misma o no estar presentes en absoluto.

También suelen presentan síntomas respiratorios (por ejemplo, dolor de garganta, congestión nasal o tos)

El periodo de incubación es de 3 a 17 días. Durante este tiempo, la persona no tiene síntomas.

La enfermedad suele durar entre 2 y 4 semanas.

La transmisión de persona a persona del virus de la viruela del mono se produce por contacto directo con el material de la lesión o por exposición a las secreciones respiratorias. Los informes sobre la transmisión de persona a persona describen un contacto estrecho con una persona infectada. La transmisión en entornos sanitarios se ha descrito raramente.

Existe riesgo alto de contagio si:

Medidas de protección de intervinientes

En las atenciones a pacientes con sospecha o viruela del mono confirmada se recomienda:

Si el paciente no necesita traslado hospitalario se le deben dar recomendaciones para que acuda a su médico de Atención Primaria para control, seguimiento de la patología y evitar otros contagios en su entorno. El informe se debe dejar en la oficina del jefe de guardia habiendo recogido los datos de nombre, apellidos, DNI/pasaporte y fecha de nacimiento para notificar estos datos a Salud Pública.

Una vez finalizado el aviso: