Procedimientos Asistenciales, SVA: Manejo de la vía aérea difícil
MANEJO DE LA VÍA AÉREA DIFÍCIL
Se considera vía aérea difícil aquella que condiciona una situación en la que el médico tiene dificultad en la ventilación con máscara facial y balón de reanimación, dificultad con la intubación endotraqueal o con ambas.
Se considera ventilación difícil cuando existe dificultad para mantener una SatO2 > 90%, ventilando a presión positiva intermitente con FiO2 de 1.0 con mascarilla facial y balón de reanimación, en un paciente cuya saturación basal es mayor de 90% (previamente a la enfermedad o accidente).
Se considera esta situación cuando sean necesarias manipulaciones extraordinarias para la facilitación de la ventilación, tales como: ajustes de la cabeza y cuello, necesidad de elevación forzada de la mandíbula, aplicación de dos manos para sujetar la mascarilla o la ayuda de un segundo reanimador.
Así mismo, se considera laringoscopia difícil cuando no se pueda visualizar ninguna porción de las cuerdas vocales mediante la laringoscopia directa convencional (Grados III y IV de la Clasificación de Cormack y Lehane).
| Clasificación de laringoscopia
según Cormack y Lehane |
| Grado | Estructuras visible |
| I | Glotis, incluyendo comisura anterior y posterior. |
| II | Aspecto posterior de la glotis. Comisura anterior no se ve. |
| III | Solamente epiglotis. La glotis no puede ser expuesta. |
| IV | Solo se ve el paladar duro (la epiglotis y la glotis no se ven).
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Se considera intubación traqueal difícil la situación en la que (de forma independiente a la laringoscopia difícil):
- Son necesarios múltiples intentos o más de un operador..
- Es necesario usar un fiador o un introductor de tubo traqueal (FROVA) para facilitar la intubación traqueal.
- Se necesita un dispositivo de intubación alternativo.
Procedimiento a seguir
- Actúe conforme al procedimiento de Manejo de la vía aérea
- Valore la indicación de realización de aislamiento de la vía aérea
- Valore la dificultad en la ventilación activa del paciente y realice una exploración con laringoscopia convencional (en paciente convenientemente sedado) para distinguir el grado de dificultad en la intubación.
PACIENTE SIN DIFICULTAD A LA VENTILACIÓN
A - Paciente con laringoscopia sin o con menor dificultad (Grados I-II de Cormack y Lehane):
- Comience con laringoscopia convencional. Utilice 30 segundos como máximo para cada intento de intubación.
- A partir del primer intento fallido, utilice el dispositivo FROVA junto a la laringoscopia convencional. Considere a partir del segundo intento el cambio de operador
- Tras esos tres intentos, utilice el videolaringoscopio, junto al dispositivo FROVA.
- Tras dos intentos fallidos con el video laringoscopio, de no más de 30 segundos cada uno, considere la utilización de la Mascarilla laríngea.
Si durante la asistencia no se puede garantizar una adecuada oxigenación del paciente, pase a considerar al paciente en la situación de Laringoscopia con dificultad en la ventilación
B - Paciente con laringoscopia difícil (Grados III-IV de Cormack y Lehane)
- Realice intubación por videolaringoscopia desde el primer intento de intubación y optimice técnicas:
- Asegure una correcta colocación del paciente.
- Utilice una pala del videolaringoscopio de tamaño adecuado.
- Aplique presión externa laríngea (Maniobra de BURP: ver procedimiento de intubación endotraqueal).
- En paciente obeso no traumatizado, utilice la posición "en rampa" (elevación de la cabeza, el cuello y la parte alta del tórax en un ángulo de 20 a 30 grados sobre el resto del tronco con alineación del meato auditivo externo y el hueco supraesternal).
- No sobrepase los 30 segundos en realizar ese primer intento.
- Utilice el tubo introductor FROVA con el videolaringoscopio si tras el primer intento fallido de intubación, después de estas medidas, sigue existiendo una visión limitada en la laringoscopia (grados II-III de Cormack y Lehane). Se realizarán como máximo otros dos intentos, de no más de 30 segundos de duración cada uno, observando en todo momento la correcta ventilación y oxigenación del paciente.
- Considere el cambio de operador tras el primer intento fallido con FROVA más videolaringoscopio.
- Tras los tres intentos anteriores, y si la ventilación sigue siendo adecuada, considere la inserción de la mascarilla laríngea.
Si durante la asistencia no se puede garantizar una adecuada oxigenación del paciente, pase a considerar al paciente en la situación de Laringoscopia difícil con dificultad en la ventilación.
PACIENTE CON DIFICULTAD A LA VENTILACION (Sat 02 < 90% con FiO2 de 1 (Basal previo > 90%))
A - Paciente con laringoscopia sin o con menor dificultad (Grados I-II de Cormack y Lehane):
- Comience con laringoscopia convencional con FROVA desde el primer intento. Utilice 30 segundos como máximo para el intento.
- Tras el primer intento fallido, utilice el videolaringoscopio con FROVA. Optimice en todo lo posible la ventilación del paciente.
- Si tras los dos anteriores intentos no se consigue aislar la vía aérea, y si la situación respiratoria lo permite, introduzca una mascarilla laríngea.
B - Paciente con laringoscopia difícil (Grados III-IV de Cormack y Lehane)
- Realice intubación por videolaringoscopia desde el primer intento de intubación y optimice técnicas:
- Asegure una correcta colocación del paciente.
- Utilice una pala del videolaringoscopio de tamaño adecuado.
- Aplique presión externa laríngea (Maniobra de BURP: ver procedimiento de intubación endotraqueal).
- En paciente obeso no traumatizado, utilice la posición "en rampa" (elevación de la cabeza, el cuello y la parte alta del tórax en un ángulo de 20 a 30 grados sobre el resto del tronco con alineación del meato auditivo externo y el hueco supraesternal).
- No sobrepase los 30 segundos en realizar ese primer intento.
- Utilice un dispositivo alternativo tras un intento fallido de intubación endotraqueal en condiciones de dificultad para la ventilación, y si la situación respiratoria lo permite, mediante la inserción de la mascarilla laríngea.
- Realice una cricotiroidotomía si el dispositivo alternativo no permite una correcta oxigenación, o bien, si tras el intento de intubación con FROVA, la situación respiratoria no admite retrasos. En estas situaciones de dificultad respiratoria, no está recomendada la intubación retrógrada.
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| Manual de Procedimientos SAMUR-Protección Civil · Edición 2025 versión 0.0 |